¿Cómo limpiar el caudalímetro adecuadamente?

Por Ruta 401

El caudalímetro, también conocido como sensor MAF (Mass Air Flow), es un sensor que permite medir de forma precisa la cantidad de aire que entra en el motor. Este parámetro, sumado a otros, contribuye a un funcionamiento óptimo del motor. Por ello, es fundamental conocer cómo limpiar el caudalímetro adecuadamente para realizar un correcto mantenimiento de este componente cuando convenga.

limpiar caudalimetro

Señales de un caudalímetro sucio

Gracias a la información que el caudalímetro proporciona a la ECU, esta puede calcular la dosificación necesaria de combustible para que la mezcla sea precisa.

Si el sensor está sucio, podría enviar un dato incorrecto a la ECU. Por eso hay que limpiar el caudalímetro siempre que sea necesario para evitar ese problema.

¿Cómo desmontar y montar un motor desde cero? Guía paso a paso 

La suciedad acumulada puede consistir en restos que deja pasar el filtro de aire del motor, como por ejemplo carbonilla (que puede provenir de un fallo en la combustión o puede estar propiciada por un modo de conducción no recomendado). También la humedad puede poner en riesgo el sensor; en este sentido, las inclemencias meteorológicas o los gases de aceite del cárter pueden afectar negativamente al componente.

Cuando hay que limpiar el caudalímetro o cuando este se encuentra en mal estado, pueden notarse los siguientes síntomas:

  • Pérdida de potencia considerable.
  • Testigo de avería encendido en el cuadro de instrumentos.
  • Mayor consumo.
  • Mayor contaminación (expulsión de humo negro denso por el escape).
  • Funcionamiento irregular del motor al ralentí.
  • Funcionamiento anómalo del turbo.

Pasos a seguir para limpiar el caudalímetro

Si se percibe cualquiera de los síntomas citados en el apartado anterior, es preciso revisar el estado del caudalímetro, puesto que podría ser necesario limpiarlo.

A continuación, se explican los principales pasos a seguir para limpiar un caudalímetro correctamente:

  1. Este componente suele situarse en el tubo de admisión, tras el filtro del aire. Para limpiarlo hay que empezar por su desmontaje, para el cual es necesario aflojar las abrazaderas que lo sujetan al tubo de admisión y a la caja del filtro (a veces puede ir fijado con tornillos) y desconectar su conexión eléctrica con cuidado.  
  2. Se recomienda desmontar el sensor y separarlo de la carcasa de acople al tubo de admisión para poder limpiar el caudalímetro en profundidad. Es importante que, al extraerlo, no se le dé ningún golpe, puesto que es una pieza muy frágil y cualquier impacto podría afectar a su necesaria precisión. 
  3. A continuación, hay que cubrir el alojamiento del caudalímetro (entre la caja del filtro y el tubo de admisión) para evitar que puedan entrar residuos durante la limpieza del componente.
  4. Tras liberar la pieza de la suciedad superficial, se debe utilizar un producto especializado para la limpieza profunda del componente. En el mercado pueden encontrarse productos técnicos para tal fin, como el limpiador de contactos LOCTITE SF 7039 que, además de limpiar el caudalímetro sin dejar residuos, deposita una capa impermeable que protege de la oxidación. Además, la aplicación de este producto es sencilla y precisa gracias a una cánula que puede acoplarse a la boca del aerosol.

Es importante aplicar el producto por ambas partes del sensor (por la zona de lectura y por la de conexionado eléctrico).

  1. Es adecuado limpiar también el conector procedente de la unidad de control para que no vuelva a contaminarse el sensor al volver a conectarlo. 
  2. Una vez finalizada la limpieza del caudalímetro, es preciso dejar que seque adecuadamente antes de volverlo a instalar en el vehículo.
  3. A la hora de reinstalarlo, es fundamental localizar la flecha impresa sobre el componente que marca el sentido del aire para montarlo en su posición correcta. La flecha debe indicar el sentido del aire, que va desde el filtro hacia el motor.
  4. Como paso final, se recomienda comprobar el correcto funcionamiento del sensor. Para ello, es necesario utilizar un multímetro y tomar la tensión sobre el pin oportuno del cable (ya sea de 4, 5 o 6 pines) con el motor al ralentí. La medición tomada debe contrastarse con el margen de valores estipulado por el fabricante (normalmente, en motores de gasolina la medida debe estar entre los 0,9 y los 1,5 V, mientras que en el caso de los modelos diésel el valor debe encontrarse entre 1 y 2,4 V).
  5. Si, tras limpiar el caudalímetro y comprobar su funcionamiento, se detecta alguna anomalía, debe optarse por la sustitución del componente, ya que su reparación no es aconsejada por tratarse de un dispositivo sumamente complejo. 

New call-to-action

Consejos de mantenimiento del caudalímetro

Como se ha expuesto, mantener limpio el caudalímetro es fundamental para su correcto funcionamiento y, por otro lado, conservar el filtro del aire en correcto estado es también imprescindible para salvaguardar este componente. En este sentido, lo adecuado es reemplazarlo entre los 10.000 y los 15.000 kilómetros, dependiendo del uso y lugar de circulación habitual del vehículo. 

Otra recomendación importante para garantizar un buen mantenimiento del caudalímetro es usar un aceite de motor de calidad y que se encuentre en buenas condiciones. Como se ha mencionado, los gases de aceite que proceden del cárter pueden llegar a empañar el caudalímetro y afectar a su funcionamiento.

Conclusión

El caudalímetro es una pieza delicada que precisa ser manipulada cuidadosamente. Mantenerlo limpio y libre de impurezas es importante para alargar su vida útil. Para ello, se recomienda limpiar el caudalímetro adecuadamente siguiendo los pasos y consejos que se han expuesto en este artículo.

New Call-to-action

Categorias: Reparación mecánica