Los dos sistemas de frenado existentes en una moto son, básicamente, el freno de disco y el freno de tambor. Mientras que el primero consta de un disco solidario a la rueda, sobre el que se presionan unas pastillas (ferodos) ancladas a unas pinzas que ejercen resistencia al giro de la rueda al ser actuadas, el freno de tambor de la moto consiste en un cubo anclado a la rueda sobre el que rozan unas zapatas al presionar el freno.
El montaje de un sistema u otro depende, fundamentalmente, del tamaño y prestaciones de la moto e, indirectamente, de su precio. Los frenos de disco son mejores en cuanto a rendimiento (esencialmente por su diseño y por la gran capacidad que tienen para disipar el calor), mientras que los frenos de tambor de moto son más económicos. No obstante, también es posible que el vehículo monte un sistema de frenos combinado. En esos casos, normalmente se instalan los frenos de disco en la rueda delantera, que requiere de mayores exigencias, y un freno de tambor en la trasera.
Partes de un freno de tambor de moto
Para entender las distintas modalidades que existen de este sistema, es necesario conocer el funcionamiento de cada parte esencial de los frenos de tambor de moto:
- Tambor (también conocido como campana). Fundamentalmente, consta de un cubo en cuyo interior se encuentra la pista de frenado sobre la que rozan las zapatas.
- Zapatas. Constan de una base de aluminio sobre la cual está adherido o remachado un forro de fricción, encargado de rozar contra la pista de frenado del tambor para posibilitar el frenado de la rueda. Lo normal es que un sistema de freno de tambor de moto monte dos zapatas.
- Portazapatas. Son el elemento sobre el que se anclan las zapatas. Van fijadas sobre ellas mediante un punto fijo (rotatorio) y otro punto móvil, que se encuentra tensado por unos resortes y se mueve a la merced de una leva de accionamiento.
- Levas. Al accionar el freno, las levas empujan las zapatas contra el tambor.
Tipos de frenos de tambor de moto
Existen varias clasificaciones para los frenos de tambor de moto en función de distintos factores:
- En función del tipo de tambor podemos distinguir el freno de tambor central y el de tambor lateral (ya no empleados). Como su nombre indica, la diferencia entre ambos es la posición del tambor con respecto al buje de la rueda.
- Según el número de levas, los frenos de tambor de moto pueden ser simples, de doble leva o de cuatro levas. En los sistemas de doble leva, a diferencia de en los de una leva, las zapatas no van fijadas a un punto estático en uno de sus extremos, sino que ambos extremos son flotantes y están guiados por una leva cada uno. Por eso, la aproximación de la zapata al tambor no es giratoria, sino paralela, lo cual aumenta la superficie de rozamiento y, por lo tanto, permite ejercer más fuerza.
La opción de cuatro levas, menos común, consiste en un sistema con dos levas por cada lado del tambor (y, en consecuencia, también cuatro zapatas).
- Según su funcionamiento, los sistemas de frenado de tambor en vehículos pueden ser mecánicos o hidráulicos, pero en motocicletas siempre se han utilizado los mecánicos, donde la simple presión del pedal o de la maneta de freno tira de un cable y actúa el movimiento de las zapatas. En los sistemas hidráulicos, la actuación de las zapatas se consigue gracias al efecto de un pistón hidráulico.
Consejos de mantenimiento
A continuación, se exponen algunos consejos de mantenimiento del sistema de freno de tambor de una moto que deben seguirse periódicamente:
- Ajustar la holgura del freno. Tanto si se trata de un freno de pedal como de uno de maneta, una holgura excesiva se va a percibir porque la frenada no es efectiva en gran parte del recorrido del pedal o la maneta. Esto es debido al desgaste de las zapatas y puede corregirse gracias a que el sistema cuenta con unos tensores que regulan las levas y que permiten acercar las zapatas al tambor.
- Cambiar las zapatas. Cuando el recorrido del tensor ha llegado a su fin, significa que ya no puede corregirse más la holgura y que, por lo tanto, las zapatas se han desgastado por completo. Estas deben ser sustituidas a tiempo ya que, si no, podría dañarse la pista de frenado del tambor (surcos), que es bastante delicada.
La sustitución de las zapatas también debe realizarse si el grosor de la banda de fricción ha bajado del límite de trabajo establecido por el fabricante.
- Comprobar el buen estado de los resortes. La rotura de cualquiera de los muelles puede dañar la pista del tambor porque las zapatas podrían salir de su posición e incluso llegar a romperse.
- Tarar el apriete de la leva contra las zapatas siguiendo las indicaciones y valores establecidos por el fabricante. Un tarado incorrecto puede llevar a un desgaste prematuro del freno.
- Lubricar las levas para optimizar su funcionamiento y alargar la vida útil del sistema de frenado.
- Limpiar periódicamente el sistema de frenos. El sistema de freno de tambor de una moto no permite una fácil expulsión de la suciedad. Esta se acumula en su interior y puede llegar a comprometer la efectividad de la frenada. Por ello es importante limpiar los componentes con un limpiador adecuado como, por ejemplo, LOCTITE SF 7235.
La periodicidad de mantenimiento adecuada de los frenos de tambor de una moto dependen en gran medida del uso que se le dé y del abuso que se haga de los frenos. Es fundamental que los técnicos de taller sean conscientes de ello y orienten a los clientes según las necesidades específicas de cada caso ya que, para que el freno de tambor de moto aporte la efectividad de frenado de la que es capaz, debe mantenerse adecuadamente y siguiendo las recomendaciones del fabricante.
Fecha de actualización: 1 de abril de 2024