Parte del trabajo del profesional del taller pasa por saber reparar un cierre centralizado, un sistema electrónico que permite el bloqueo y desbloqueo de todas las puertas del vehículo de forma simultánea y automática.
Este pertenece al sistema de seguridad del vehículo, puesto que incorpora funciones automáticas para la seguridad de los ocupantes como, por ejemplo, el bloqueo de la apertura de puertas cuando se sobrepasa cierta velocidad o su desbloqueo cuando se produce un impacto.
Este equipamiento, extendido ya de serie en todos los vehículos que se comercializan en la actualidad, ha evolucionado a lo largo del tiempo, por eso ahora reparar un cierre centralizado es algo más complicado.
Los primeros cierres centralizados utilizaban sistemas basados en la estimulación eléctrica de unas bobinas que hacían mover un mecanismo de empujadores y levas. Actualmente, son unos motores eléctricos los que se encargan del bloqueo o desbloqueo de las puertas, comandados por un detector infrarrojo que recibe la señal desde varios posibles emisores: desde el mando a distancia, a través de la llave manual, a través de un botón en el interior del habitáculo o bien desde el propio sistema de seguridad del vehículo.
Averías más comunes y cómo reparar un cierre centralizado
El cierre centralizado es un dispositivo de mucho uso y, teniendo en cuenta que se trata de un sistema electro-mecánico, no es raro encontrarse con alguna avería a lo largo de la vida del vehículo. Por eso es frecuente que el profesional del taller tenga que reparar cierres centralizados.
Las averías más comunes que suelen darse en estos sistemas son las siguientes:
- Desacople entre el motor y la varilla de cierre en alguna de las puertas. Esta avería es puramente mecánica e implica que el cierre centralizado de una de las puertas no funciona adecuadamente. Sin embargo, sí se puede percibir (de forma sonora) que el motor actúa. Es una avería sencilla que solo hace necesario el desmontaje del panel interior de la puerta para poder volver a acoplar el motor y la varilla de cierre.
- Avería en el cableado del sistema eléctrico. Esta avería se hace evidente de una manera parecida a la anterior: el cierre de las puertas no funciona por igual en todas ellas. Puede ocurrir que el sistema no funcione en una de las puertas, en varias o en todas. Ante esta situación, el motor no actúa y la solución no es tan sencilla como en el caso previo. Para reparar el cierre centralizado, aquí debe revisarse tanto el sistema central como la instalación del cableado en los paneles de puerta, por si existiera un corte en algún punto.
- Fusible averiado. Esta avería se evidencia de la misma manera que un fallo del cableado. Tras comprobar que el fusible se encuentra en mal estado, solo hace falta sustituirlo para dar solución al problema.
- Pilas del mando a distancia agotadas. Esta situación hace que, al cerrar el vehículo, se oiga el ruido correspondiente al bloqueo de puertas e, inmediatamente, se vuelva a oír un ruido de desbloqueo. La solución es sencilla y evidente, se deben sustituir las pilas del mando.
- Avería en la centralita de carrocería o centralita de confort. Esta centralita es la unidad de gestión de los sistemas electrónicos de confort del vehículo. Mediante la máquina de diagnosis se puede determinar si esta unidad está funcionando de forma adecuada y acotar el foco del fallo. Pese a que es un componente delicado, es posible su reparación y es recomendable hacerlo cuanto antes para evitar que desencadene fallos en otros sistemas electrónicos.
- Efecto de un inhibidor de frecuencia cercano. Esta no es una situación común, ya que los inhibidores de frecuencia están rotundamente prohibidos. Sin embargo, es bueno tener presente que este aparato puede evitar que la señal del mando a distancia funcione mientras se encuentre dentro de su radio de acción. Evidentemente, esto no supone ningún tipo de avería y no hace necesario reparar el cierre centralizado.
- Avería desconocida. Tras comprobar que todas las posibles causas de avería no se están dando, se recomienda el reseteo del sistema de cierre centralizado. Es fundamental llevar a cabo esta operación siguiendo las instrucciones del fabricante, puesto que cada marca y modelo tiene su modo de proceder. En cualquier caso, es recomendable la previa desconexión de la batería durante un tiempo prudencial (15 - 20 minutos), lo que puede conllevar la desconfiguración de algunos sistemas (sistema multimedia, techo solar, ESP, etc.) y hacer que deban volverse a configurar posteriormente, siguiendo también las instrucciones del fabricante.
Conclusiones
El mal funcionamiento del cierre centralizado no suele ser una avería grave. Aunque sí puede ser un imprevisto inoportuno, casi siempre existe la posibilidad de una solución inmediata utilizando la llave de mano.
Las averías en el cierre centralizado, como se ha expuesto en este artículo, pueden ser muy diversas y su resolución puede ser más o menos compleja dependiendo del caso en cuestión. Sin embargo, siempre es recomendable acudir a un taller de confianza, especializado en electrónica del automóvil, que compruebe correctamente el sistema y se ocupe de reparar el cierre centralizado si es necesario, evitando así la aparición de consecuencias más graves.