Trucos para usar un compresor para pintar

Por Ruta 401

El compresor para pintar es un elemento fundamental en todos los talleres de chapa y pintura. Se utiliza prácticamente todos los días, por eso es muy importante realizar una elección y un mantenimiento adecuado para evitar posibles averías que entorpezcan el trabajo en el taller.

compresor para pintar

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Un poco de teoría…

El compresor de aire es una máquina que, cuando aumenta su presión, desplaza fluidos compresibles, tales como gases o vapores. Así, se produce un intercambio de energía entre la propia máquina y el fluido, en el que el trabajo que ejerce el compresor para pintar se transfiere a la sustancia. De esta forma, a través de la denominada energía cinética, se impulsa su expulsión.

También queremos contarte que la diferencia entre una bomba y un compresor es que las bombas son máquinas hidráulicas, mientras que los compresores son térmicos. En estos últimos, el fluido de trabajo sufre un cambio de densidad por temperatura, a diferencia de los ventiladores o sopladores que impulsan fluidos compresibles sin aumentar su presión, densidad o temperatura de una forma considerable. 

 

Un poco de historia…

Es necesario remontarse algunos años atrás para ver el origen del compresor. La historia cuenta que los primeros compresores para pintar tienen su origen en los antiguos herreros, que usaban los fuelles para la forja de hierro en la época de los griegos y los romanos.


Durante el siglo XVII, el ingeniero alemán Otto von Guericke mejoró los compresores atmosféricos inventando la primera bomba de oxígeno. En 1829 fue patentada la primera fase del compresor atmosférico. Años más tarde, en 1872, el compresor fue mejorado y usado para el mundo del buceo.

Los compresores se empezaron a utilizar poco a poco en muchos sectores. Primero, los mineros usaron motores a vapor para producir la presión necesaria para poner en marcha los taladros. Después, con la llegada del motor de combustión interna se rediseñan los compresores atmosféricos, que fueron muy usados en negocios como el autolavado, y en la industria de los talleres mecánicos. 

 

Tipos de compresores 

  • Compresor de desplazamiento positivo: Tiene unas dimensiones fijas, por cada movimiento del eje de un extremo a otro se tiene la misma reducción en volumen y aumento de presión. Se usan para alta presión y poco volumen, como una bomba de inflado de bicicletas.
  • Compresor de émbolo: Se trata de un vástago impulsado por un motor. En cada movimiento hacia abajo del émbolo, el aire es introducido a la cámara mediante una válvula. Cuando se mueve hacia arriba se comprime el aire y otra válvula se abre para evacuar el aire comprimido. Se usan para trabajos domésticos.
  • Compresor de tornillo: Utiliza dos tornillos largos para comprimir el aire dentro de una cámara larga. Se inserta aceite para mantener todo el sistema lubricado y evitar la rotura de los tornillos.
  • Compresor de pistón: Son los más utilizados. La compresión se lleva a cabo por el movimiento alternativo de un pistón accionado por un mecanismo biela-manivela. En la carrera descendente se abre la válvula de admisión y el cilindro se llena de aire para que en la carrera ascendente se comprima saliendo por la válvula de descarga.

 

Trucos de utilización de un compresor para pintar

  • Verificar el nivel de aceite en el cárter del compresor; hay que cambiarlo regularmente. En el mercado existen algunos compresores que no necesitan lubricación.
  • Vaciar el agua que se acumula en el calderín y los filtros a través de los purgadores del compresor.
  • Comprobar que el filtro de admisión de aire esté limpio.
  • Comprobar las correas de arrastre.
  • Limpiar el equipo para garantizar su correcto funcionamiento, para ello se debe utilizar disolvente compatible con la pintura utilizada, agua para las emulsiones y las pinturas al agua y aguarrás en el caso de pinturas sintéticas. No se debe sumergir el equipo en disolvente.
  • Limpiar la superficie que se va a pintar y utilizar lija para eliminar el óxido e irregularidades.
  • Pintar sobre un sitio limpio, sin polvo protegiendo el suelo y humedeciéndolo. Evitar corrientes de aire.
  • Cubrir las partes del vehículo que no se vayan a pintar como lunas, faros o cualquier otro elemento de este tipo.

 

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