Un osciloscopio para automoción es un instrumento de diagnosis utilizado en el taller mecánico para tomar mediciones eléctricas y cuantificar señales, entre otras funciones. Por la gran evolución que ha vivido la parte electrónica de los vehículos en la última década, el osciloscopio se ha convertido en una herramienta completamente indispensable en todo taller mecánico.
La gran versatilidad del osciloscopio permite la medición de muchas variables electrónicas a través de los sensores y actuadores instalados en los diferentes sistemas del vehículo: motor, frenos, transmisión, suspensión, sistemas de seguridad, etc. La función final del osciloscopio en automoción es ayudar a detectar anomalías eléctricas en el vehículo y prever posibles averías.
A diferencia del voltímetro, el osciloscopio no solo lee las señales de voltaje fijo, sino que toma una lectura precisa de las diferentes señales variables del vehículo y devuelve gráficas representativas de su variación temporal (ya sea en una pantalla incorporada en el propio osciloscopio o a través de un ordenador externo). La gráfica se compone de un eje vertical Y, que representa el voltaje, y un eje horizontal X, que representa el tiempo.
Tipos de osciloscopios para automoción
Según su funcionamiento interno, los osciloscopios para automoción pueden ser analógicos o digitales:
- Osciloscopio analógico. Trabaja directamente con la señal aplicada. Para que pueda representar una traza en la gráfica, requiere una señal periódica, si no, solo representa un punto. Los osciloscopios analógicos son ideales cuando se quieren observar variaciones de señal en tiempo real.
- Osciloscopio digital: Convierte la señal analógica de entrada en digital y la representa en la gráfica. Es ideal para dar lectura de señales puntuales, no repetitivas, como los picos de tensión.
- Osciloscopio de fósforo digital combina las características del osciloscopio analógico y del digital.
¿Qué componentes se pueden comprobar con el osciloscopio para automoción?
El osciloscopio puede mostrar una gran variedad de formas de onda y, por lo tanto, puede comprobar todo tipo de señales eléctricas de diversos componentes del vehículo. A continuación, se definen algunos de los usos más comunes del osciloscopio en automoción:
- Sistema de inyección. El osciloscopio puede dar lectura de los impulsos de los inyectores. Es decir, consigue medir la duración de apertura de los inyectores y, por lo tanto, puede comprobar si la unidad de control marcha correctamente en distintas condiciones de funcionamiento del motor.
- Sistema de control del aire de ralentí. Existen diferentes válvulas que controlan el sistema de aire del ralentí. Cuando se aplica al motor una carga adicional, se reducen las revoluciones al ralentí y el tiempo de funcionamiento de las válvulas debe aumentar, si no es así, es posible que exista una válvula defectuosa.
- Sensor de oxígeno (sonda lambda). Este sensor del sistema de emisiones del vehículo mide la cantidad de oxígeno en el flujo del sistema de escape. Así, detecta si el motor está funcionando con una mezcla correcta de combustible y oxígeno. A partir de ahí, el sensor manda una señal eléctrica a la ECU. En función de la tensión leída por el osciloscopio, se identifica si la mezcla es rica, pobre u óptima.
- Sensor de detonación (picado). Este sensor mide la vibración provocada por la combustión y, si es diferente a la habitual, manda una señal para retrasar el encendido y así proteger el motor y optimizar su funcionamiento. La forma más recomendable de medir si el sensor funciona correctamente es desmontándolo del motor y golpeándolo levemente. La onda de la gráfica resultante en el osciloscopio debe ser similar al patrón.
- Sensor de velocidad (del cigüeñal). Este sensor suministra información a la ECU, en forma de señal eléctrica, de la velocidad del motor. De esta manera, la ECU puede gestionar y controlar los sistemas relacionados: sistema de control de tracción, sistema de encendido, control de estabilidad, ABS, control de transmisiones automáticas, gestión de la inyección, etc. El osciloscopio mide la señal del sensor y la traduce a una gráfica que debe compararse con un patrón, para verificar que el funcionamiento del sensor es correcto.
- Sensor de posición del árbol de levas. Este sensor, que funciona de manera coordinada con el sensor del cigüeñal, permite determinar la posición del primer cilindro para poder calcular el momento de encendido y de inyección. Con el osciloscopio se puede determinar si la señal es correcta, comparándola con la gráfica óptima según fabricante. Si la señal es plana o no es constante, el sensor ha llegado al fin de su vida útil.
- Sistema de encendido. Con el osciloscopio, en automoción, también se pueden medir las señales de los circuitos del sistema de ignición. Si el circuito funciona con normalidad, el oscilograma resultante es una muestra del patrón, mientras que si se observa alguna alteración en la gráfica, es señal de avería en la ignición.
Teniendo en cuenta todos los sistemas que puede evaluar un osciloscopio en automoción, la importancia que tiene este dispositivo a la hora de realizar el diagnóstico de una avería en un taller electromecánico es obvia.
Conclusión
Gracias al osciloscopio para automoción, un instrumento que puede valer entre 200 € y 1.500 € (según sus características y capacidad de almacenamiento), es posible analizar con exactitud la señal de cualquier circuito del vehículo, a partir de la información proporcionada por sensores o actuadores.
Fecha de actualización: 15 de marzo de 2024