Consejos útiles para la limpieza de un motor

Por Ruta 401

El vano motor es una de las partes del vehículo más olvidadas en términos de mantenimiento. La limpieza del motor y unos cuidados adecuados no tienen por qué favorecer la durabilidad del propio componente, pero sí influyen en la vida útil de muchas piezas del mismo, especialmente de aquellas cuyos materiales sean susceptibles de envejecimiento o daño ante los efectos adversos del paso del tiempo, la suciedad, los residuos acumulados y las condiciones climatológicas.


El hecho de limpiar el motor o no, siempre ha sido motivo de debate entre los profesionales del sector automotriz. Por un lado, existe la opinión de que la limpieza del vano motor es indispensable; por el otro, la de que no es recomendable porque puede provocar daños en sus componentes. La realidad es que, dependiendo de cómo se haga, ambas opiniones son válidas.

limpieza de motor

Consejos útiles para la limpieza del motor de un coche

Al realizar la limpieza del motor de un coche hay que tener en cuenta que se trata de un elemento imprescindible para el vehículo, lleno de pequeñas y complejas piezas y componentes que pueden verse afectados por el agua y otros líquidos.

Por ello, a la hora de limpiar un motor, es importante tener siempre en cuenta una serie de precauciones, especialmente estas:

  • Disponer de un entorno adecuado. Se requiere un lugar que tenga un sistema de tratamiento de aguas residuales, ya que se van a verter diferentes líquidos. Del mismo modo, el espacio para la limpieza del motor debe estar lo más ventilado posible y libre de humedad excesiva para evitar cualquier tipo de contaminación.
  • Colocar el vehículo en una posición horizontal y elevada, para poder acceder a los bajos del motor, que es la parte donde se suele acumular más suciedad.
  • Cubrir con plásticos o protectores específicos aquellos elementos más frágiles o susceptibles de ser dañados, como por ejemplo la defensa delantera, el capó o las aletas delanteras.
  • Eliminar la suciedad superficial, hojas, polvo, arena, etc. con un soplador de aire a presión, una brocha o un aspirador.
  • Desenchufar los bornes de la batería y protegerla de humedad y residuos, sobre todo las zonas delicadas o sensibles a la humedad. Si la limpieza de contactos fuera necesaria, siempre deben utilizarse productos específicos.
  • No aplicar agua a presión de forma directa sobre las partes más sensibles del motor y evitar, en la medida de lo posible, que el líquido penetre en casquillos, enchufes, conexiones eléctricas, bujías, alternador, alarmas, fusibles, sensores, etc. Si se mojan, secarlas inmediatamente.

En este punto, cabe destacar que, en el caso de motores antiguos, es recomendable evitar la limpieza húmeda siempre que se pueda, puesto que sus materiales no están tan preparados para el contacto con el agua y podrían sufrir graves averías.

  • Cabe prestar especial atención a las mantas del capó, ya que si se les aplica agua en exceso o no se secan adecuadamente, se pueden descolgar y deteriorarse prematuramente.
  • No limpiar el motor cuando todavía está caliente, ya que esto podría provocar un choque térmico al aplicarle agua fría. Un fuerte contraste de temperatura en el motor podría ocasionar destemples de materiales que podrían llevar a futuras fisuras.
  • Utilizar el limpiador de motor adecuado en cada caso o para cada pieza, así como contar con el equipo necesario (brochas, cepillos, pistola de agua o material para proteger partes sensibles). 
  • Si se usan desengrasantes o productos similares, hay que tener siempre en cuenta las recomendaciones del fabricante en cuanto a cantidades, mezclas y forma de aplicación.
  • Una vez terminada la limpieza del motor, secarlo con aire comprimido, trapos o al aire libre para asegurarse de que no queden restos de humedad. Cuando se haya eliminado la mayor parte de la humedad, se recomienda dejar el coche al ralentí unos minutos para que se vaya evaporando la restante.
  • Se aconseja nutrir cada una de las partes plásticas o gomosas para aumentar la durabilidad de las piezas utilizando un rejuvenecedor de plásticos.
  • No hay que olvidar lubricar ciertos componentes que pueden haber perdido la lubricación, como pueden ser bisagras, cerraduras, mecanismos de capó, etc.

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Limpiadores de motor recomendados

Entre las recomendaciones citadas en el punto anterior para la limpieza de un motor, se encuentra la de elegir un producto específico para esta parte esencial del vehículo, que no sea dañino o agresivo con las piezas, ni pueda provocar averías o cortocircuitos.

En este sentido, marcas como LOCTITE ofrecen una amplia gama de productos especializados, entre los que se encuentra LOCTITE SF 7840, un desengrasante concentrado en base agua sin compuestos orgánicos volátiles. Es un limpiador de motor no inflamable y que no incorpora elementos tóxicos. Elimina grasa, aceite, alquitrán, suciedad incrustada, etc., y se puede diluir con agua.

Por otro lado, existen productos específicos para limpiar determinadas partes del motor, como es el caso de LOCTITE LB VALVE GRIND, que está indicado para la limpieza, rectificado y esmerilado de válvulas; o LOCTITE SF 7039, un aerosol con alto poder impermeabilizante que permite limpiar partes de este componente expuestas a contactos eléctricos o bornes de baterías.

La limpieza del motor es un servicio que el cliente agradece mucho, pero hay que realizarla correcta y cuidadosamente para evitar daños colaterales durante el proceso. 

¿Por qué realizar una limpieza del motor y cada cuánto tiempo hacerlo?

Realizar una limpieza del motor adecuada no solo ayuda a ralentizar el envejecimiento de ciertos componentes del mismo, sino que también puede aportar un plus en el valor de reventa del vehículo. Además, mantener el motor limpio permite identificar con mayor facilidad una posible fuga en algún conducto cercano, por lo que puede ser vital en ciertos casos.

Sin embargo, realizar limpiezas de motor muy asíduamente puede llegar a ser contraproducente para el vehículo, ya que se podrían acabar dañando diferentes sistemas electrónicos. 

Realizar dos limpiezas de motor al año puede ser suficiente, aunque todo depende del tipo de uso que se le dé al vehículo y el entorno por el que circule (nieve, arena, barro, gravilla, etc.). Fundamentalmente, es recomendable realizar esta limpieza después de la temporada de nevadas y lluvias (para prevenir oxidaciones y daños provocados por la sal) y tras la época estival (para limpiar el exceso de polvo que suele acumularse en verano y nutrir piezas que podrían haberse resecado en exceso). 

Recomendación

Cuando se habla de limpiar un vehículo, a menudo se piensa exclusivamente en la limpieza del habitáculo y del exterior. Sin embargo, no hay que olvidarse de limpiar la zona del vano motor al menos dos veces al año.

La limpieza del motor debe ser realizada por un profesional, en un centro adecuado que disponga de las herramientas y productos necesarios, ya que un trabajo inadecuado podría poner en riesgo elementos del vehículo tan importantes como el sistema eléctrico o el propio motor.



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Categorias: Limpieza y mantenimiento