El blog estrena web. ¿Aún no la has visto? Descúbrela aquí

Tipos de guantes para el profesional del taller

Por Ruta 401

Los guantes son elementos imprescindibles en la equipación de cualquier profesional, ya que protegen las manos de cortes o quemaduras, además de ser básicos para la limpieza e higiene. Deben ajustarse a lo estipulado en la norma UNE-EN 420 que marca los requisitos que debe cumplir un guante según criterios de confort, eficacia y marcado.

guantes-taller

DESCARGAR GUÍA SOBRE HERRAMIENTAS EN EL TALLER

Existen distintos tipos de guantes, confeccionados mediante diferentes materiales y con características que los hacen ideales para determinadas tareas. Veamos cuáles son estos tipos de guantes y para qué usos están destinados en un taller.

Guantes para manipular productos químicos: Los guantes son indispensables para tratar productos químicos y residuos, ya que la exposición directa a determinadas sustancias podría provocar irritación, quemaduras, infecciones u otras enfermedades. Estos guantes deben cumplir las normas establecidas en cuanto a condiciones de penetración, permeabilidad y degradación. Suelen estar hechos de materiales plásticos como látex, neopreno, polietileno, nitrilo o PVC.

Guantes para trabajos de soldadura o para manipular materiales a altas temperaturas. En un taller mecánico es común tener que hacer tareas de soldadura o manipular piezas muy calientes, por lo que exponemos nuestras manos a quemaduras e incluso a la radiación por culpa de los rayos infrarrojos. Por supuesto, es necesario que se trate de guantes ignífugos y que tengan resistencia al calor, siendo una gran solución los guantes de caucho o los de kevlar.

Guantes para labores de mecánica: Protegen las manos de cortes, golpes y suciedad durante el trabajo en el área mecánica. Suelen estar hechos de cuero ya que es un material más fino, que permite mayor sensibilidad al tacto y una importante resistencia a la abrasión. En este caso también podemos apostar por los guantes textiles, que son ligeros e impermeables, apropiados para numerosas labores, siempre y cuando no exista riesgo de perforación o de contacto con sustancias químicas. Y si buscas unos guantes mucho más resistentes para tareas mecánicas que incluyen riesgos de cortes o abrasión, lo ideal es elegir unos guantes de kevlar.

Guantes para trabajos con gasolina, ácidos y disolventes: El principal problema de algunos guantes, como por ejemplo los de látex, es que no son resistentes a la degradación que provoca estar en contacto con la gasolina o con productos disolventes. Para manipular este tipo de materiales en el taller se recomienda usar guantes de malla metálica que, dependiendo de su composición, son resistentes a acetonas, disolventes y/o ácidos.

Como puedes ver, existen muchos tipos de guantes y sus compuestos pueden estar mezclados y combinados de diferentes maneras. Lo realmente importante es saber qué tipo de protección ofrece cada uno y para qué tareas nos van a resultar imprescindibles. 

 
Guía Seguridad en el taller
 

Categorias: Seguridad