Como hemos contado en otros artículos, la fibra de vidrio es un material que se utiliza mucho en la industria del automóvil, y que está formado por filamentos poliméricos que tienen una base en sílice. Hoy queremos hablarte de este elemento y sobre todo de su reparación, para que sepas qué procedimiento seguir en todo momento.
La fibra de vidrio la podemos encontrar en paragolpes, salpicaderos, piezas delanteras y traseras, incluso en asientos. Pero antes de hablar de los productos y procedimientos para reparar fibra de vidrio queremos tocar primero las tipologías que nos podemos encontrar, así sabrás cómo hacer una reparación adecuada para cada elemento:
Existen dos procesos: el primero a partir de un proceso de fundición directo y el segundo por refundición de canicas. Los dos empiezan con un material sólido que se combina con otros en un horno.
Las acciones más habituales que podemos encontrarnos en el taller con que se hacen sobre fibra de vidrio van desde las pequeñas reparaciones de paneles y alerones hasta grandes reconstrucciones de piezas, sobre todo en el sector del tuning y la competición.
Cuando llega al taller un vehículo que presenta una rotura o un daño en un elemento de este compuesto, lo primero es valorar qué sistema de reparación vamos a usar, una decisión que va a variar dependiendo de la zona dañada y de la envergadura de la rotura.
Por eso, nos vamos a centrar en dos formas diferentes:
Recomendamos utilizar LOCTITE PP15, que es, en nuestra opinión, el más idóneo para acabados de relleno, y TEROSON UP 325 GFF. Estos dos productos se trabajan como cualquier masilla de relleno, aplicándolos con espátula y añadiendo un catalizador en la proporción adecuada, preferiblemente el que nos recomienda el fabricante. Una vez seco, se lija con diferentes granos para un acabado homogéneo y así permitir que después pintemos la superficie.