Como conductores, para poder circular con un vehículo por las vías públicas hemos tenido que aprendernos el código de circulación y pasar los exámenes correspondientes. No obstante, eso no nos convierte en sabedores universales de las normas de circulación. En algunos lugares del mundo podemos encontrarnos con normas de lo más curiosas.
12 normas de circulación que te dejarán con la boca abierta
En Botswana el conductor de una motocicleta no puede circular con un animal que le dificulte la visibilidad. Hay que cumplirlo a rajatabla porque la multa es de unos 400 € y el infractor puede enfrentarse a cargos de entre 6 y 24 meses de prisión.
En Nueva Gales del Sur está prohibido salpicar con agua o barro a los viandantes, pero no a todos, solo a los que están esperando al autobús. ¡Ojo!, porque la multa es de más de 1.400 € al cambio.
En Denver está prohibido conducir un coche negro un domingo soleado. Mejor que tu coche sea de otro color
En Finlandia los taxistas deben tener una licencia específica si quieren poner música cuando llevan pasajeros. Esta licencia cuesta alrededor de 45 € por año.
En Manila no todo el mundo puede circular con su vehículo cualquier día . Los días que pueden circular vienen determinados por los últimos cuatro dígitos de la matrícula. En este caso, es para regular la afluencia de tráfico.
En Alabama, la ley de circulación especifica que está prohibido que una persona ciega conduzca un vehículo a motor.
En Arkansas no se puede tocar el claxon a partir de los 9 de la noche en zonas donde se vendan bebidas con hielos o sandwiches, no fuera caso de que alguien se atragantara del susto.
En Eureka, en el estado de California, está totalmente prohibido dormir en la autopista, sin importar lo cómodo que sea el asfalto.
En Dinamarca, el código de circulación dice que los conductores deben asegurarse siempre de que no hay ningún niño bajo el coche antes de emprender la marcha. ¡Cuantas más medidas de precaución, mejor!
En Estonia los conductores están obligados a llevar en el vehículo dos bloques de madera, para colocarlos en las ruedas al aparcar en pendientes. Más vale prevenir que curar.
En Turquía no basta con tener triángulos reflectantes en el vehículo. Además hay que llevar un extintor y un kit de primeros auxilios. Conductor precavido vale por dos.
En Alaska está prohibido dejar atado a un perro en el techo del vehículo. Esperamos que tampoco esté permitido atarlo al parachoques trasero...
Como vemos, el mundo está lleno de costumbres y normas distintas a las nuestras. Algunas nos pueden parecer surrealistas y otras nos pueden servir de ejemplo. Lo que es seguro es que conducir en un país que aunara todas estas normas sería una verdadera locura.
